Muere Piedad Córdoba, reconocida política colombiana

Colombia se despide de una de sus figuras políticas más emblemáticas, Piedad Córdoba, quien falleció a la edad de 66 años. Con una trayectoria marcada por su compromiso con la izquierda liberal y su incansable lucha por la paz en el país, su partida deja un vacío en la escena política y un legado que trasciende fronteras ideológicas.

Nacida el 25 de enero de 1958 en Medellín, Piedad Córdoba se destacó desde temprana edad por su activismo social y su defensa de los derechos humanos. Su ingreso a la política se produjo en la década de 1980, y desde entonces se convirtió en una voz influyente y respetada en el ámbito nacional e internacional.

Uno de los hitos más destacados en la carrera política de Córdoba fue su papel como mediadora en las negociaciones entre el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Su compromiso con la búsqueda de una solución pacífica al conflicto armado colombiano la llevó a ser una figura clave en las conversaciones de paz.

A propósito de la muerte de #PiedadCórdoba comparto parte de la entrevista que le hice para mi libro “HemBRujaS, sobre #equidaddegénerohttps://t.co/YcwMSdjI2d pic.twitter.com/BUfX1W44ai— Claudia Palacios (@claudiapalacios) January 20, 2024

Su labor como facilitadora en estos diálogos fue reconocida a nivel global, pero también le valió críticas y amenazas. La persistencia de Piedad Córdoba en su empeño por encontrar una salida pacífica al conflicto la hizo blanco de diversos sectores que no compartían su visión. A pesar de los riesgos, su valentía y determinación fueron fundamentales para avanzar en el proceso de reconciliación en Colombia.

La pérdida de Piedad Córdoba no solo deja un vacío en la política colombiana, sino que también representa la desaparición de una voz firme y comprometida con la justicia social y la defensa de los más vulnerables. Su legado inspirará a las generaciones futuras a seguir luchando por un país más equitativo y en paz.

La izquierda liberal pierde a una de sus representantes más destacadas, pero su legado perdurará en la memoria colectiva. Piedad Córdoba, con su incansable lucha por la paz, deja un recordatorio de que la política puede ser un instrumento para transformar realidades y construir un futuro más justo.

En un momento en el que Colombia enfrenta desafíos políticos y sociales, la partida de Piedad Córdoba invita a la reflexión sobre el camino que el país debe seguir para alcanzar una paz duradera. Su ausencia física se siente, pero su espíritu y sus ideales seguirán guiando a aquellos que buscan un país en el que la justicia, la equidad y la paz sean pilares fundamentales.